El Litio como nuevo objetivo en el Reciclado

Cuando hablamos de Economía Circular siempre pensamos en la recuperación de todos los compuestos y componentes de un residuo. Ahora bien, lograr esto es realmente complicado desde el punto de vista técnico y, sobre todo, económico. Si también se le añade que el residuo de partida son pilas de Litio no recargable, el reto es, hoy en día, casi inasumible por la industria del reciclado.

Reciclar las pilas de Litio no es atractivo desde el punto de vista de su tratamiento. Todo lo contrario que el de sus hermanas en nombre, las baterías de Li-ion recargables. Éstas últimas contienen Cobalto, elemento químico muy codiciado por su alto valor en el mercado, convirtiéndolo en un polo de atracción en el sector del reciclado.

Sin embargo, debemos reciclar todas las pilas y baterías. Y además, la industria del reciclado debe conseguir que sea posible técnica y económicamente viable. Por eso Envirobat España SL, dentro de su línea de trabajo de Economía Circular, ha apostado por desarrollar un proceso que consiga recuperar el Litio y otros elementos de las pilas de Litio no recargable o primario.

El proyecto Recuperación de Litio de Baterías No Recargables

En la actualidad, no existe ningún proceso industrial en el que el Litio primario se recicle de manera exclusiva. Se opta por reciclarse conjuntamente con otro tipo de baterías de Litio, por lo que es difícil cuantificar los elementos recuperados de este tipo de baterías. El objetivo fundamental del Proyecto Recuperación de Litio de Baterías No Recargables, RELIBANE (financiado por ICEX, bajo contrato 14/2019) es el estudio a nivel de laboratorio. Como su posterior puesta a punto a escala industrial de un proceso hidrometalúrgico específico y único. A partir de este se podrá recuperar el Litio contenido en las baterías primarias recogidas como residuo. De esta manera, el Litio y otros elementos presentes en las pilas, podrían ser empleados como materia prima en la fabricación de nuevas baterías, disminuyendo así la demanda de materias primas naturales.

Desde el punto de vista energético y medioambiental, un proceso hidrometalúrgico para la extracción del Litio sería más favorable que los procesos actuales.

El método planteado por Envirobat España en el Proyecto RELIBANE consta de dos procesos principales: mecánico y químico, precedidos de un paso previo, no menos importante, de descarga de las baterías.

Características del metal

El Litio es un metal muy reactivo, con alto riesgo de incendio en caso de manipulación inadecuada. Por eso, la primera fase del proceso es la optimización de un proceso de descarga de las baterías. Para ello se emplean diversas disoluciones con solutos medioambientalmente beneficiosos, en las que se introducen las pilas. Este tipo de descarga favorece la posterior reutilización de reactivos, evitando así la generación de residuos.

Posteriormente se produce la separación por medios físicos, tras la cual, se procede a concentrar el Litio que se pretende recuperar como elemento principal. Se ha de poner en relieve que tanto el rendimiento como las calidades de los compuestos químicos reciclados dependen principalmente de esta fase final, es decir, la hidrometalúrgica, que se divide a su vez en dos pasos principales: lixiviación, cuyo objetivo es la extracción del Litio y precipitación, mediante la cual se consigue separara selectivamente el compuesto de Litio esperado. El resto de compuestos lixiviados conjuntamente con el Litio serán objeto de estudio para su posterior valorización.

Del presente Proyecto, se obtendrá la primera patente en Europa para la recuperación de Litio a partir de baterías no recargables.
Os invitamos a seguir más de cerca las novedades del proyecto en ENVIROBAT.